UC - Críticas
| Países: España, USA y Reino Unido. |
Interpretación: Clive Owen (John Farrow), Carice Van Houten (Sue Farrow), Daniel Brühl (padre Antonio), Pilar López de Ayala (Luisa), Ella Purnell (Mia Farrow), Izán Corchero (Juan), Kerry Fox, Héctor Alterio. |
TERRORES INFANTILES
"Intruders" es una interesante, aunque no siempre acertada, película de terror sobre los terrores infantiles y las secuelas que dejan en la vida adulta. Se trata de una co-producción ambiciosa que ha permitido al director canario Juan Carlos Fresnadillo, contar con un reparto internacional de cara a la posible exportación del film al mercado extranjero y es que el cine de su director bebe mucho de la narrativa norteamericana como ya demostró en sus films anteriores "Intacto" y "28 semanas después", ambos superiores a este.
En “Intruders” conoceremos a Juan, un niño de 7 años con una imaginación desbordante. En su habitación de un barrio humilde de Madrid, sufre los salvajes ataques de un intruso sin rostro que domina sus pesadillas sin que Luisa, su madre, pueda evitarlo. Mia, una niña londinense de doce años en plena transición hacia el mundo adulto, lee a sus compañeros de clase el misterioso cuento acerca de Carahueca, un monstruo obsesionado con los niños. Ese mismo día, John Farrow, su padre, sufre un accidente en el rascacielos en construcción donde trabaja. Las vidas de las dos familias, separadas por miles de kilómetros, darán un vuelco: los intrusos ya están en sus casas, y no van a irse hasta haber conseguido lo que quieren.
La culpa de que no acabe de funcionar la interesante propuesta inicial de combinar una historia de drama psicológico con el típico cine de terror con monstruo en el armario, no es de su director, sino del flojo guión. El texto hace confluir dos historias que avanzan en paralelo para confluir en el tercer acto, pero los espectadores más avispados ya sabrán el nexo que las une desde mucho antes (lo que resta interés al relato), pese a las trampas y recursos de despiste utilizados por los guionistas y el montador. Por suerte, la sabiduría cinematográfica de Fresnadillo, a través de una puesta en escena eficaz y su poderosa capacidad de creación de atmósferas mantendrá la magia y la intensidad hasta la sosa resolución.
El resparto realiza un trabajo desigual, aunque en general consiguen mantener a flote sus personajes llenos de agujeros de guión. Destacan el siempre solvente Clive Owen y la niña Ella Purnell (cuyo personaje homenajea a la actriz de un clásico del género, ya que se llama Mia Farrow), pero rechina bastante el personaje del sacerdote interpretado por un perdido Daniel Brühl y se desaprovecha absurdamente la presencia de Héctor Alterio. En definitiva, una película correcta con un planteamiento más ambicioso de la simple apariciencia de cine de sustos (lo que es de agradecer), que naufraga en la construcción de la historia y que reflota a través del imaginario de su director.
